Se suscitan eventos que están fuera de mi control. Mi reacción inmediata, susto, desconfianza, temor, sufro y entonces recuerdo que tengo opciones. Que mi actitud no beneficia a nadie al contrario termina perjudicándome. Entonces me hablo, busco mi centro, me aquieto y pido serenidad, protección, y entrego esto a la naturaleza divina y decreto: “En armonía para …” Comprendo hoy, porque el efecto dominó, las caídas literales y emocionales que he tenido en todos los sentidos. Siento que algo se murió. Veo hoy que este proceso inició hace un tiempo. Y hoy se revelan ante mí tantas cosas. Tanta gente, tantas circunstancias, tantos eventos tan necesarios para culminar aquí y ahora, ante esto que es mi vida y que ha sido todo un placer llevar. Lo grato y lo no tan grato, las llegadas, las despedidas, los puntos suspensivos, las comedias, las tragedias, los amigos, los amantes, los sonidos, los sentidos, los seres, las agonías, las incomprensiones, el amor, la compasión, la decepción, la mu...
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